Lo peor que nos puede pasar es no poner caras en lo cercano. Urdacis hay muchos, con otros nombres, y no podemos considerar normal asistir a espectáculos bochornosos cada vez que encendemos alguna cadena vinculada al poder político local.
El último ejemplo, propio de aquel curso de ética periodística que se entregaba cada semana en el primer CQC, canta tanto que ni siquiera lo justifica la firma de Oviedo Televisión. Espero que sean ciertos esos rumores de que La Nueva España va a comprar la cadena, se seguirán equivocando en el fondo pero por lo menos mejoraremos en las formas.
Por lo demás, nada que añadir a lo que Cuando Oviedo te sorprende comenta:
[...]
Su zafiedad consiste en transmitir una noticia de forma distorsionada y falseada, en cubrir unas opiniones ocultando las que no le interesan y convirtiendo en publireportaje, lo que se supone que es un informativo. Eso es una zafia estafa a sus televidentes.
La grosería la añade la curiosa circunstancia de que otra vez, como ocurre en el Pleno, los "duendecillos" técnicos, impiden que escuchemos,, en el raquítico y breve espacio destinado a la opinión de la Portavoz de la Oposición, su voz. Nadie pide disculpas por ello.
[...]
No hay comentarios:
Publicar un comentario