24/2/09

El enigma del ático izquierda de Álvarez Cabrero y la historia de unos grabados



Que un lunes a las diez y media de la noche, el Teatro Filarmónica presente una buena entrada para ver una película de Álvarez Cabrero representa un punto de optimismo. El estreno estuvo además muy bien presentado.

Definida como comedia de suspense, El enigma del ático izquierda es una película sin subvención y de muy escaso presupuesto (mil doscientos euros). Con una sinopsis sencilla, dura 65 minutos:
Una joven pareja compra un piso de segunda mano y se encuentra con que está habitado por un fantasma.

Vía: Átalo en corto
La trama sirve de coartada para poner movimiento y sonido a situaciones que parecen sacadas de los cuadros del pintor-director (director y de todo en esta película). Hasta el andar de los personajes es reconocible, también los escenarios. Si hay algo como un Oviedo castizo-alternativo ese no lo retrata nadie mejor que Cabrero. No creo que en otra película, por mucho que se pasee Woody Allen por la ciudad, pueda aparecer un un parapsicólogo con boina haciendo Tai-Chi en el CAU.

Como película hay que destacar esa parte plástica y humorística pero también la riqueza de los planos, interesantes pese a rudimentarios. Tiene defectos, claro: unos actores muy forzados, alguna parte se hace larga y el final que no es muy redondo. Con un "baratometraje" no hay que ser exigente.

Ahora os cuento la otra parte. De tarde nos acercamos hasta la casa de Carlos Cabrero. No nos conocíamos pero contactamos con él a través de su blog y email para hacernos con alguna obra con la que poder alegrar un poco la casa. Nos enseñó algunos grabados guapísimos de su último libro, consciente de nuestro bajo presupuesto ("tengo el libru ahí pero ye un libro pa millonarios"), al final nos llevamos envuelto:

Un grabado de "El 600" aunque a mi me gusta más que por el 600 porque sale también un 1500 como el que tenía mi padre cuando era pequeño (un coche de tercera mano que se jubiló en una nevada y que había sido taxi y que como todos los 1500 tenía un aspecto tan yanki):
Otro de "El Bar Rosa" que nos gusta por lo que nos recuerda al Cecchini y al Chanel y porque Iggy Pop tiene que tocar algún día en Colloto:
y una lámina de la serie "Hazañas bélicas", que nos regaló y que -en cierta medida- parece ya una realidad con tanto coche con pegatina de la cruz:


Post relacionado: Yo también me caí por las escaleras del...

3 comentarios:

David Suárez Suarón dijo...

Saludos de un actor ex-forzado.

factoria7gritos dijo...

No te lo tomes a mal Suarón, yo lo hubiese hecho muchísimo peor. Además, lo que cuenta es que los actores transmitíais, las expresiones y los diálogos aunque eran un poco forzados comunicaban igual. Por cierto ¿Quién eras? :-)

David Suárez Suarón dijo...

No, no me lo tomo a mal ni mucho menos. En parte tienes razón pero hay que tener en cuenta los condicionantes de la película. Es así para lo bueno y para lo malo.

Yo era el sufrido fantasma jejej