12/2/09

La faceta House del poder local

Ese médico de mala hostia, relato de ficción con gran éxito en la tele, anuncia que participamos de una historia en la que consentimos al cómico borde si es honesto, inteligente y te saca del problema. Admiramos, además, que haga lo que le dé la gana porque la mayoría no podemos hacerlo.

Lo que podríamos llamar "faceta House" ha resultado interesante en los primeros años del gobierno municipal, ahora comienza a ser ridícula y contraproducente. Era honesto e inteligente pensar que la fachada tenía que ser decente y eran divertidos los ramalazos autoritarios.

Pero ahora cambia la película, quizás porque el personaje esté encasillado, camino de los 20 años en su mismo papel. Que una ciudad empiece a pudrirse en su deuda al tiempo que un alcalde aumenta su patrimonio personal y se vea salpicado por casos recientes no demasiado edificantes, acaba con la supuesta honestidad. Que una ciudad pierda sus símbolos (derribos, proyectos ilusionantes,...) por antojo de esa misma autoridad local, no es tampoco lo más inteligente. Todo eso unido a una fachada que se desmorona (y que ya no es única a poco que se pasee por otras ciudades) convierte al cómico borde, en borde sin pizca de gracia y desaparece el tipo al que admiramos por su hacer en función de su humor al levantarse.

El modelo ya no vale porque ahora sólo es una mala copia, incluso de sí mismo, y terminará en el momento en que le perdamos el cariño por lo que fue y ya no es. Tampoco servirá de mucho perpetuarse con otros rasgos y mentar el "cerco", ya no vale.

Da igual si la falta de confianza llega por una gran decepción concreta o si viene en el día a día, como parece ser el caso. Esto se acaba y tampoco es reemplazable en los mismos términos, no vendrá otro Gabino/a (aunque sea de otro color político).

En momentos de agotamiento hace falta más bien otra historia y otra estrella. La audiencia manda.

2 comentarios:

Sergio dijo...

Me ha encantado, este post, así que omitiré mis habituales rollos para comentar, porque creo que no le sobra ni le falta ni una coma, y me limitaré a lo que hago cuando, como "audiencia", me entusiasma una representación operística, que sabéis que la ópera me encanta. Exclamar : Bravo !!!

factoria7gritos dijo...

Gracias Sergio :-)