31/3/09

Mandar

Definamos mandar, como nunca se debería hacer, recurriendo a su contrario.

La noche del periodismo ciudadano es interesante porque, aunque el interrogatorio no difiere mucho de lo que cualquier periodista tiene en la agenda, el entrevistado/a no se relaciona igual y el entrevistador/a además puede exigir compromisos. La clave de esta última edición, con Rajoy, quizás pase desapercibida pero es muy importante: no manda.

Es más bien tarde. Rajoy acaba de encajar el golpe moral de Eric, un inmigrante sin papeles. Patinó o ¿no? al decirle que "aquí no puede venir todo el que quiera", mientras se lo piensa, aparece Juan David un trabajador social canario. Expone el drama de los cayucos y pide solidaridad al resto de comunidades autónomas para acoger inmigrantes y un compromiso concreto al líder de la oposición: que llame a los presidentes de los lugares donde gobiernan y se hagan cargo.

Mariano Rajoy empieza a responder con una historia introductoria. Lleva toda la noche abonado a la política del relato así de paso da imagen de informado, de cercano al tiempo que se humaniza (cosas de los asesores de comunicación que ya le convencieron en su día para contarnos el cuento de la niña). Empieza bien porque enlaza una historia vivida en primera persona, que son las mejores historias. Es una historia dolorosa de ver a dos personas muertas pero a la petición concreta no se compromete, echa balones fuera: habla del gobierno de España, bla, bla, bla. No le falta razón pero y ¿de lo suyo? ¿El PP será solidario o no? No lo será, Rajoy no levantará el teléfono mañana para hablar con Camps o Aguirre de este tema y no les pedirá su compromiso.

¿Cuál hubiera sido la mejor respuesta ayer? Mire conozco bien el problema, vi llegar un cayuco con dos personas muertas y tiene razón hace falta solidaridad, en el PP vamos a dar ejemplo y mañana mismo llamaré a Aguirre y a Camps para pedirles el mismo esfuerzo que le voy a exigir al Presidente del Gobierno de España y esto convencido de que al menos en nuestras comunidades se pondrán a trabajar en ello. Más o menos es todo lo que dijo, menos el asunto del esfuerzo propio.

Cuando Rajoy le dice al camerunés Eric que "España no es un país donde todo el mundo puede venir sin más" parece que manda, que tiene criterio y que lo aplica pese a que no guste. Cuando elude hablar con sus presidentes autonómicos está bien claro que no manda. No subscribe el compromiso porque se teme la respuesta. Teme la bronca interna. Tengo la sensación de que Mariano Rajoy es un político mucho más débil de lo que parecía.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen análisis,
Un abrazo,
Jonás

Daniel dijo...

Es un politico con pocas habilidades sociales y un poco vago, yo siempre digo que Zapatero es un hombre con mucha suerte y muchas habilidades sociales.

factoria7gritos dijo...

Gracias por vuestros comentarios. Estoy de acuerdo Daniel.